Situada en el norte de la provincia de Alicante, Altea, a pesar de las apariencias (y especialmente de las imágenes en Instagram), no es ni Santorini ni Capri. Sin embargo, su atractivo es innegable. Altea tiene una personalidad única que se destaca por sí misma. Su casco antiguo laberíntico, que ha sido declarado Bien de Interés Cultural, es una prueba viva de su alma como pueblo marinero y agrícola.
En la localidad costera de Altea, es conocida comúnmente como la cúspide del Mediterráneo. La base de este sobrenombre se origina en las dos hermosas cúpulas de cerámica azul, que pertenecen a la iglesia del Consuelo, y que dominan el casco antiguo desde la cima de una colina. El resto es una serie de casas encaladas dispersas en una ladera que desciende gradual pero constantemente hacia las profundidades del mar Mediterráneo. El turista, experto en identificar lugares auténticos, hace mucho tiempo que descubrió en Altea un sitio especial al que volver una y otra vez. Quizás por esto, en la actualidad, de los 25,000 habitantes de Altea, el 40 por ciento son extranjeros. Además, Altea está rodeada de otras joyas de la Costa Blanca, como Calpe o Benissa, ambas con un rico legado histórico. Si te estás preguntando qué hacer o qué lugares visitar en Altea, a continuación te lo detallamos.
Recorriendo el Casco Antiguo de Altea
El pintoresco centro histórico de Altea, conocido en valenciano como El Fornet, ha logrado mantener su estructura tradicional, a pesar de la constante actividad turística en la Costa Blanca durante décadas. Con vistas al mar Mediterráneo, el antiguo pueblo de Altea, un laberinto blanco de callejuelas empedradas y escalinatas serpenteantes, se despliega de manera orgánica en la ladera de una colina. En su interior, abundan los pequeños detalles que hacen que este rincón mediterráneo sea especial: mosaicos inesperados, puertas ornamentadas y flores de colores por todas partes. Nuestra sugerencia: camina por sus calles y déjate sorprender por todo lo que Altea tiene para ofrecer.
Iglesia del Consuelo: Un Ícono Emblemático
La Iglesia se encuentra situada dentro del Casco Antiguo de Altea, en la parte más alta del pueblo. Esta iglesia es más que una estructura; es un símbolo de la identidad de Altea. Una característica principal son las dos grandes cúpulas de cerámica azul, que son un símbolo inseparable de la ciudad y pueden verse desde cualquier punto, incluyendo el paseo marítimo y las playas. Las vistas panorámicas que ofrece desde sus alrededores son impresionantes, brindando una visión panorámica de la ciudad y el mar que la rodea.
Mirador de la Cruz: Donde los Sueños Alcanzan las Alturas
Los amantes de las panorámicas quedarán cautivados por el Mirador de la Cruz, un lugar mágico que ofrece una vista de ensueño de Altea y sus alrededores. Al atardecer, el cielo se tiñe de tonos cálidos y las aguas del Mediterráneo reflejan la belleza de este espectáculo natural. Este rincón te conectará con la grandeza de la naturaleza y la serenidad del mar.
Explorando el Mercadillo de Altea
Los martes, Altea cobra vida con su pintoresco mercadillo que llena las calles con colores y aromas. Desde productos frescos y locales hasta artesanías únicas, este es un lugar donde puedes sumergirte en la cultura local y llevar contigo un pedacito de Altea. Las delicias gastronómicas disponibles te permitirán disfrutar de sabores auténticos mientras te mezclas con los habitantes locales.
Cada martes, excepto los días festivos, se celebra el mercado semanal, que cuenta con cerca de 300 puestos y comienza a las 8:00 de la mañana y termina a las 14:00 horas. En términos generales, se encuentra en dos calles principales. En el Carrer de la Filarmónica, encontrarán puestos que ofrecen frutas y verduras de la huerta valenciana.
Paseo Marítimo: Un Refugio Junto al Mar
El Paseo Marítimo de Altea es un remanso de tranquilidad donde puedes sentir la brisa marina en tu rostro mientras paseas o te sientas a contemplar el horizonte. Los restaurantes a lo largo de esta ruta ofrecen delicias culinarias que combinan la frescura del mar con la autenticidad de la cocina local. Es un lugar ideal para relajarte y disfrutar de la vida junto al mar.
Playa de la Olla: Un Paraíso de Relajación
Si buscas la perfección playera, la Playa de la Olla te brindará todo lo que deseas. Sus aguas cristalinas y arena suave crean un ambiente perfecto para relajarte bajo el sol mediterráneo. Ya sea que prefieras nadar en sus aguas tranquilas o simplemente descansar en la orilla, esta playa te garantiza momentos de serenidad y placer.
Explorando Más Allá: Destinos Cercanos
Altea es un punto de partida perfecto para explorar lugares cercanos llenos de historia y naturaleza. Calpe, con su imponente Peñón de Ifach, te espera con oportunidades de senderismo y vistas panorámicas de ensueño. Y no puedes perder la oportunidad de visitar Guadalest, una ciudad histórica que se alza en lo alto de una colina y ofrece una experiencia cultural inigualable.
Consejos para Disfrutar al Máximo de Altea
Lleva zapatos cómodos y actitud caminante: El urbanismo de Altea hacen que el casco antiguo sea tan fotogénico como laberíntico. Prepárate para caminar y perderse por sus calles empedradas, aunque a menudo sin salida o que te saquen inesperadamente del centro. La magia está en la exploración.
Sé consciente del tiempo: En Altea, el tiempo tiene su propio ritmo. Muchas tiendas abren después de las 11, y ten en cuenta que los horarios de comida y cena pueden variar debido a la influencia de turistas y residentes de otros países europeos. ¡No te sorprendas si los camareros ya están pensando en cerrar cuando recién estás por empezar la cena!
Prepárate para la playa: Si planeas disfrutar de las playas, lleva escarpines o cangrejeras. Aunque las playas, como la de la Olla, son maravillosas y no suelen estar abarrotadas, están cubiertas de piedrecitas blancas que pueden ser un desafío para los pies delicados.
En resumen, Altea es una joya en la costa mediterránea que ofrece una mezcla única de historia, cultura y belleza natural. Desde el encanto de su casco antiguo hasta los miradores que te dejan sin aliento y las playas que te invitan a relajarte, cada rincón de esta localidad te espera con los brazos abiertos. ¡Descubre la cúpula azul y blanca del Mediterráneo y crea recuerdos inolvidables!